
Maximiliano Torino, jugador de Anzorena, se sigue recuperando de su lesión que sufrió el 5 de noviembre de 2016. De buen humor y pensando en positivo habló con Salto Inicial.
Nadie puede negar que es un tipo muy querido. En donde va, siempre hay alguien que lo saluda. Incluso cuando los rivales visitan a Anzorena, muchos van a saludarlo y le desean lo mejor. Apenas se lesionó aquel noviembre ante Centro Español de Plottier, habló con Salto Inicial y nos dijo. «Tengo que ser fuerte por mi familia». Y quien va a negar que lo está haciendo. Hace una semana en la página oficial de la A.D.Anzorena contaba: «He llorado muchas veces». Pero siempre en eso estuvo su familia aguantando como siempre.
Salto Inicial en el estadio Posta del Retamo lo encontró y no pudo obviar preguntarle sobre esas duras palabras, que hasta al más «hombre» hacen doler: «La verdad que tuve momentos muy feos, de enterarme cuando me hice la resonancia que tenía roto el tendón de aquiles y me perdía toda la temporada. Siempre miré hacia adelante para estar rápido en las canchas, metiéndoles dos horas de gimnasio junto al Profesor Juan Pablo Bordoy y contento porque ya puedo caminar. Algo tan sencillo, pero te juro que cuando andaba con muletas no me imaginaba caminando, muy feo la pasé. Ahora ya estoy muy bien de ánimo».
Además como hombre de basquetbol, que mejor que ir a un partido para sacarse el vicio: «Hoy justo vine a ver Rivadavia con Ameghino en donde habían muchos amigos. La amistad es muy grande, y bueno a veces hasta me dio ganas de entrar a jugar, pero todavía no se puede».
Uno no puede olvidar la gran campaña de Rivadavia en donde Maximiliano Torino fue una de las piezas claves del equipo Naranja que llegó a las puertas del Ascenso: «El club se portó de diez conmigo, viví momentos muy lindos, las pasé muy bien. Lo que viví en Rivadavia fue muy especial, todavía tengo el recuerdo en mi mente del estadio lleno, que no entraba un alfiler, de esos momentos no me lo voy a olvidar jamás».
Anzorena jugaba en el mismo momento en Plottier, ante Centro Español y perdía por 32 puntos. Maximiliano Torino no es ajeno al presente del equipo de la Sexta: «Sabíamos que era el puntero de la Conferencia. El objetivo nuestro hoy es llegar al quinto puesto para no enfrentarnos con Rivadavia y sí quizás con la Municipalidad de Junín o Independiente de Neuquén. Creo que tenemos tres partidos de local que sí o sí hay que ganar. Voy todos los días al entrenamiento y se matan la verdad, tienen un hambre de gloria bárbara. Las lesiones nos jugaron en contra, pero tenemos buenos jugadores. No merecemos este puesto. Solamente pudimos entrenar dos semanas todos juntos, cuando no estaba lesionado Schestakow, era Bonini, Aguilera o yo y eso es muy feo. La llegada de Estalles, le ha dado otros ánimos al equipo.
La nota se hizo el pasado 17 de febrero y la fecha de la vuelta de Torino está cerca: «Según el profe a fines o medidados de abril. Pero no quiero apurar nada, quiero hacerlo todo bien, es una lesión nada, de a poco voy a ir a ponerme mejor. Me muero por tirar al aro, de a poquito me voy a ir poniendo mejor para volver a las canchas».
Maxi, el basquetbol de Mendoza te espera. En especial Anzorena. Por buen jugador, pero especialmente por buena persona.