Matías Estalles, la cara nueva de Anzorena, habló con Salto Inicial y ya palpita el juego ante Rivadavia en el reinicio del torneo. Esta noche, a las 21:30, el Rojo hace su estreno en el 2017.
Clima tranquilo, relajado. Jorge Sánchez, Pipo Aguilera y Nico Aguilera tiran al aro que da a los vestuarios. En el aro que da a calle Olascoaga, Alejo Schestakow, Matías Estalles y Tati Bonini hacen lo propio. Todo entre risas. Al costado de la cancha, David Suárez habla con el Mono Garitaonandía. Ese es el semblante de Anzorena 2017, que hoy se estrena ante Rivadavia.
Antes de iniciar la práctica de básquet, Matías Estalles se acercó a dialogar con Salto Inicial, de cara al partido de esta noche. «Estoy entusiasmado porque estamos haciendo bien las cosas, entrenando bien. Vengo a sumar, a aportarle al equipo todo lo que le puedo dar y lo que el DT pretenda», comenzó el ex Atenas.
Era raro, después de tantos años, no ver al Caniche jugando un TFB. Por eso, el interno expresó por qué se dieron asi las cosas: «Fue una decisión mia no jugar el Federal. El año pasado fui papá y toda mi dedicación estaba en eso y, si uno quiere hacer bien las cosas en el básquet profesional, tenés que dedicarle mucho tiempo y yo no podía hacerlo».
Bonini, Aguilera, Torino. Las lesiones siguieron a Anzorena en este torneo, y en la segunda mitad esperan que no sea así. La incorporación de Estalles parece ser una solución más a la que aportó el Hacha Sánchez. «Más que a solucionar problemas, vengo a tratar de darle a un equipo joven las cosas que uno puede dar. Estuve tres meses parado, y si bien uno no se olvida de jugar, la parte física es muy importante para el torneo Federal. Tiene otra intensidad, necesitas otro estado físico», explicó el Caniche.
Acerca de como vive el hoy, el estar en un TFB, el jugar ante Rivadavia, Estalleres cerró: «El básquet es lo que más amo, estar en una cancha es todo. Mientras me de, voy a seguir disfrutando este torneo y estar en una cancha».