SELECCIÓN ARGENTINA. Enrique Tolcachier, asistente de Rubén Magnano en la Generación Dorada, recordó aquella inolvidable (y polémica) final ante Yugoslavia, donde los europeos se quedaron con el título en tiempo suplementario.
«Es un hermoso recuerdo de haber estado en esa final. Tuve la suerte de asistir a tres entrenadores en tres mundiales distintos: a Lamas en 1998, a Magnano en 2002 y a Hernández en 2006. El mundial de Indianólolis creo que fue el primer eslabón de la Selección, metiéndose en el podio de las potencias en el básquet«, expresó Tolcachier, a 18 años de un domingo inolvidable para todos los amantes de este deporte, aunque el final no fue el deseado.
Muchos entrenadores y jugadores a la hora de analizar el rendimiento del seleccionado en el Mundial 2002, aseguran que fue hasta superior que el de los Juegos Olímpicos de Atenas 2004, donde el equipo de Magnano se tomó revancha y logró la medalla dorada, el hito más importante del básquetbol argentino: «Comparar es difícil porque prácticamente es el mismo equipo, a excepción de unos recambios. Lo que sí es cierto, es que en el 2002 hubo una mayor fluidez, había un juego aceitado y el rendimiento fue muy regular en todo el torneo. En Grecia creo que hubo algunos altibajos, pero en Indianápolis el rendimiento fue alto en todos los partidos».
Ese Mundial también quedó en la historia porque por primera vez un seleccionado estadounidense compuesto ciento por ciento por jugadores de la NBA, caía en una competencia: «Como cualquier partido, teníamos la esperanza de ganar y nos preparamos para eso. La única diferencia es que sabíamos que para ganar, no podíamos tener bajones, porque los estadounidenses eso no te lo perdonan. Y creo que Argentina lo logró. Desde el minuto cero mostró un alto nivel de concentración y de juego, y pudo sostener las reacciones de Estados Unidos. Les molestaba nuestro juego de pases, además de las defensas alternadas entre individuales y zonales. Se redondeó una tarea espectacular».
Por último y volviendo al recuerdo de aquel 8 de septiembre de 2002, Tolcachier opinó sobre las decisiones arbitrales en ese cierre del cuarto período: «Detenernos en el análisis de una acción arbitral, puede ser injusto. Creo que teníamos el partido controlado. A falta de dos minutos llevábamos una ventaja de siete puntos, que si bien en el básquet no es determinante, en una final es importante. Bodiroga fue clave anotando tres canastas y tomando las riendas de su equipo, equiparando las acciones».
«Volviendo a las decisiones arbitrales, creo que hay dos polémicas en el cierre. La que más se recuerda es la falta no sancionada a Hugo (Sconochini) sobre la chicharra, pero antes hay una falta inexistente que le cobran a Luis (Scola), que a falta de seis segundos se iba solo al canasto para sentenciar el partido. El error más grande para mí es la falta cobrada a Scola. La otra es más compleja, porque FIBA tiene una concepción de que una falta en el cierre tiene que ser muy evidente, porque no quieren que los árbitros definan un campeonato».
VIDEO DEL PARTIDO DE LA FINAL DE INDIANAPOLIS 2002
Cierre del último cuarto entre Argentina y Yugoslavia
Continuando su trabajo en Regatas, Enrique habló del presente y futuro del conjunto del Lago: «Estamos trabajando con actividades virtuales. Creo que no va a haber competencias en este 2020. Ahora es momento de acompañar a los más chicos, esperando que esto pase y motivándolos para que sigan en el deporte, porque esto tarde o temprano va a pasar», sentenció.