OPINIÓN. El básquet es una familia y nos conocemos todos. La rivalidad entre clubes existe y existirá siempre. Es un folklore hermoso que lo disfrutamos desde mini hasta primera división. Sin embargo, la falta de respeto (muy común en estos tiempos), nos pone contra las cuerdas. Estamos a tiempo de cambiar. Disfrutemos del básquet, disfrutemos de nuestra familia.
Después de una semana a puro incidentes, vuelve la actividad normal de la Superliga de Mendoza. Tras varias reuniones entre directivos de la FBPM, Colegio de Árbitros y presidentes de los clubes, los árbitros volverán a dirigir a Atenas Sport Club. Es que un grupito minúsculo (de barras no simpatizantes ni socios), dañaron el auto de Leandro Robles, tras el juego del conjunto Apache con Macabi.
De inmediato, los jueces decidieron no arbitrar más un partido que involucre a la institución Apache. Desde mosquito a Primera y ambas ramas. Esta decisión, cayó muy mal en el ambiente del básquet. Dejar un fin de semana sin jugar a niños de 8 a 12 años, no tiene justificación alguna. LO SUCEDIDO CON EL AUTO DE ROBLES ES GRAVÍSIMO, Y NO SE PUEDE PASAR POR ALTO. Pero, la «medida de no dirigir» tendría que haber caído sobre el plantel de primera división y sanción sobre los autores del hecho. Existe un grabación y se puede identificar a los autores de los daños.
SALTO INICIAL, no publicó las imágenes en cuestión por decisión editorial, para no seguir alimentando este escenario violento, el cual, en las redes sociales se agranda segundo a segundo y supera cualquier límite.
Dos días después de el juego entre Celestes y Apaches, el partido entre Godoy Cruz y San José en el estadio de Petroleros YPF se suspendió cuando faltaban dos minutos para la finalización del segundo cuarto, porque cayó una lata de gaseosa al parquet desde el sector donde estaba ubicada la gente del Santo.
Uno, dos, tres, cuatros desubicados perjudicaron a toda una institución. Esta es la gente que no tiene lugar en el básquet. Y todos los conocemos, incluidos los directivos. A todos nos encanta el folklore, las banderas, los instrumentos, papelitos, etc. Pero, todo tiene un límite. Y es la falta de respeto. Soy un convencido que un Atenas vs. San José, se tendría que jugar cada 15 días. La pasión que se vive es única e inigualable. Sucedió algo similiar con los Anzorena vs. General San Martín en la década del 2000, los Talleres vs. Atenas o Talleres vs. Rivadavia en la década del 80. Eran fantástico.
Sin embargo, hoy todo cambió. La sociedad cambió. Y la agresión es moneda corriente. Y muchas veces esa violencia se transmite desde adentro de la cancha y otras desde las tribunas.
Llegó el momento de reflexionar y barajar de nuevo. Jugadores, entrenadores, directivos, público y periodistas también, porque nosotros jugamos un papel fundamental y muchas veces la manera en que brindamos la información, genera rispideces. NOSOTROS TAMBIÉN SOMOS RESPONSABLES.
Párrafo aparte para los árbitros de Mendoza. Nadie podrá negar con la calidad que se trabaja y forma a los jueces en el Colegio de Árbitros de la provincia, modelo a nivel país. Sin dudas que se extrañan tipos como Mario Aluz, Leo Barotto, entre otros. Pero, acá en Mendoza tenemos jueces como Ariel Rosas, Pablo Leyton y Micaela Prado, ¡jueces internacionales y de Liga Nacional! Un lujo. Y árbitros como Mellado, Oliver, Flores, Lucero, entre otros, con nivel de Liga Argentina y Torneo Federal. Además, muchos jueces jóvenes tienen un potencial enorme, pero necesitan roce de juego y tiempo. Desde lo técnico, es muy díficil criticar, porque nadie conoce el reglamento como ellos. Ni jugadores, ni entrenadores ni periodistas, por ejemplicar. Hoy, muchas veces falla el criterio. Misma situación de juego, distintas decisiones. Insisto, NADA JUSTIFICA UNA AGRESIÓN. SON TOTALMENTE REPUDIABLES LOS HECHOS DE VIOLENCIA CONTRA LOS JUECES. Pero, el Colegio de Árbitros, también tendrá que reflexionar y hacer una fuerte autocrítica. Hay muchas cosas por mejorar, otra opción no cabe.
Volvamos a la cancha. Disfrutemos de nuestro básquetbol en familia. Los presupuestos de los equipos de la Superliga son dignos de otra categoría. En muchos casos, superan al Torneo Federal o Liga Argentina. ¡Tenemos a Matías Sandes todos los miércoles y viernes! jugando en Mendoza. Un lujo por donde se lo mire y analice.
¡Cuidemosnos entre todos!. El año pasado se jugaron cuatro Godoy Cruz vs. Independiente Rivadavia en el Nivel DOS y el comportamiento de todos fue ejemplar. Por ahí está el camino. La prevención, concientización y respeto.
Arranca una nueva oportunidad, por favor, no la desaprovechemos… DISFRUTEMOS TODOS JUNTOS.
