APERTURA 2019. NIVEL DOS. FECHA 14. Gimnasia y Esgrima venció a domicilio a la UNCuyo por 74 a 53, en un juego donde dominó de principio a fin. Con un goleo repartido, Ryde Okwudibonye lideró al Lobo con 34 puntos en su casillero personal.
El puntero del Nivel Dos, desplegó todo su potencial basquetbolístico a lo largo de los 40′ en el complejo universitario. En todo momento, tuvo el control de las acciones, aunque la U arrancó arriba. Gran desempeño del conjunto de David Suárez en ambos cristales, sobre todo, en ofensiva donde el extranjero Okwubidonye se adueñó del poste bajo y facturó en gran forma.
Tras el Salto Inicial, el partido comenzó muy dinámico y fue el «Verdiblanco» el que rápidamente rompió el cero. Con una fuerte defensa en zona, la U cuidaba la diferencia parcial. Pero, Gimnasia y Esgrima demostró por qué es el puntero y en un par de ofensivas neutralizó la diferencia. Dos triples consecutivos de Diego Oteiza, le dieron al Lobo la posibilidad de pasar a comandar las acciones. Luego, Bellido desde los 6,75 sumó tres más y el marcador reflejó un 18-8, pasado el ecuador del primer cuarto. El cinco de Andreone no aflojó y la aparición en el tanteador de Federico Villaveirán acompañado por el experimentado Julio Petry, fue determinante para que los locales cerraran el segmento inicial, sólo por tres abajo (20-17).
En el segundo cuarto, el triple de Villaveirán puso la igualdad en 20 puntos. El goleador del Lobo, era muy bien tomado por Heck y el juego se hacía palo y palo. Sin embargo, el Blanquinegro se las ingeniaba para continuar arriba con el goleo de Bellido e Ignacio Garitaonandía. El tiempo muerto solicitado por Andreone, intentó reacomodar las piezas locales, pero las instrucciones tácticas no pudieron impedir que el Lobo continuara marcando la distancia. La U reaccionaba con una ráfaga goleadora de Villaveirán, pero no lograba mantener la regularidad y Okwudibonye se adueñaba de la zona pintada rival para ampliar el margen (43-31).
Al comenzar el segundo tiempo, el Lobo continuó sumando ante un rival que intentaba seguir en juego pero que, a pesar del esfuerzo, desperdiciaba varias ofensivas con un alto costo. Pasado los 5′, Suárez pidió minuto con la idea de volver a tener el buen desempeño del equipo, porque tuvo algunos pasajes con desaciertos. Misión cumplida: al retomar el juego, Gimnasia evidenció una clara mejoría en sus desempeños y con un imparable Okwudibonye sentenciaron la historia (60-37).
En el último cuarto, con todo definido, la rotación en ambos bancos fue el denominador común. La U tardó varias ofensivas para poder sumar y Gimnasia lo aprovechó, para sumar a través de la figura de la cancha y ponerle cifras definitivas a una nueva victoria.
SÍNTESIS